EcoHabitar

EL PORTAL DE REFERENCIA EN BIOCONSTRUCCIÓN

¡Viva la micromovilidad!

Los coches tienen los días contados en nuestras ciudades. Desplazarse en aparatosos cacharros de más de mil kilos de peso y quemando petróleo a nuestro paso, empezará a estar visto como un anacronismo o como una amenaza para la salud colectiva.

París abrirá la brecha prohibiendo la circulación por el centro de vehículos diésel en el 2020, y a partir de ahí todo irá rodado…

En París, precisamente, tuvimos la ocasión de subirnos al futuro que tenemos a la vuelta de la esquina: la movilidad personal de masas. Los coches urbanos serán mínimos y autónomos. Los desplazamientos serán mucho más eficientes. Lo más habitual será moverse en bicicleta (como ya lo es en Ámsterdam y Copenhague). Y las calles tendrán que adaptarse finalmente a la circulación de los nuevos ingenios de una o dos ruedas: patinetes eléctricos, monociclos equilibrados, ninebots, segways, hoverboards…

El festival Autonomy nos permitió conocer de cerca esa increíble fauna que, de momento, corretea haciendo eses por las aceras… “Pero pronto contarán con su espacio propio”, vaticina el surafricano Ross Douglas, fundador del certamen de la micromovilidad. “Tarde o temprano conquistarán el sitio que hoy por hoy ocupan los coches mientras “descansan” en nuestras calles. ¡Se acabó eso de convertir las ciudades en gigantescos aparcamientos! Vamos a vivir en lugares más humanos, más respirables y menos congestionados”.

Algo se está moviendo bajo el asfalto, aunque aún nos cueste verlo. Los grandes fabricantes como Renault y Nissan se suben al carro de la micromovilidad con modelos como el Twizy. La MIT aspira a diseñar el vehículo ideal de tres ruedas para el desplazamiento urbano. Micro, pionera de la fiebre infantil de las dos ruedas, se lanza al mercado de minicoches eléctricos con el Microlino. Egret pretende trasplantar la fiabilidad del “made in Germany” al patinete eléctrico…

la micromovilidad

Y eso por no hablar de la nueva generación hoverboards, segways y monociclos eléctricos que están esperando a dar el salto definitivo al futuro; o la multitud de aplicaciones que permitirán que nos movamos como “ciudadanos inteligentes”; o la promesa de la inteligencia artificial y la robótica al universo de la micromovilidad…

“Las alternativas al coche privado serán cada vez más atractivas y más necesarias”, vaticina el diseñador Dan Sturges. “Al fin y al cabo el 50% de los desplazamientos urbanos son de menos de cinco kilómetros, y el 28% son de menos de 1 km y medio. Nuestros coches son una pieza demasiado sofisticada de ingeniería para usarlos de esta manera. Es como matar una cucaracha con una pistola”.

“Todo, en las ciudades, empezará a girar en torno a la bicicleta”, vaticina Sturges. “Y para quienes quieran algo más que la bici tradicional, habrá otras opciones como las “ebikes”, los patinetes eléctricos o los vehículos eléctricos “vecinales”, que serán de uso compartido y más parecidos a los “carritos de golf” que a los coches actuales”.

la micromovilidad
Ninebot, unidad auto-equilibrado inteligente en una sola rueda

El cuadraciclo eléctrico de EV4, la ebike plagable de Lehe o el “girópodo” de Ninebot (controlado a distancia y con una autonomía de 30 kilómetros) fueron algunas de las máximas atracciones del Festival Autonomy que convirtió el parque de La Villette en un auténtico laboratorio de la ciudad del futuro, con 150 expositores y más de 20.000 visitantes.

“Hasta ahora, el debate ha estado demasiado centrado en cómo disuadir el uso del coche privado”, advierte Phil Trin, investigador de innovación urbana del MIT. “Durante décadas, las dos únicas alternativas han sido el transporte público y la bicicleta. Pero la tecnología finalmente se ha tomado el reto en serio: necesitamos encontrar otras maneras para movernos por las ciudades”.

Y mientras en China levantan barreras a todo lo que no sea el coche, Japón despunta como el campo de pruebas de la micromovilidad. “Para movernos por la calle nos bastarán vehículos ligeros, de una o dos plazas, preferiblemente alquilados o compartidos”, vaticina Masaki Honda, de la consultora Frost & Sullivan. “Con los problemas de tráfico y contaminación que tenemos en las ciudades, el coche ha dejado de ser una conveniencia para convertirse en una pesadilla”.

Artículo publicado en la revista EcoHabitar Nº52 Invierno 2016


Te puede interesar: Bristol, capital verde y mutante


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

¿Te gustó este artículo?
¡Apoya a EcoHabitar!


Suscríbete al boletín


 

ANUNCIO
escudos térmicos by Mateu Ortoneda escudos térmicos by Mateu Ortoneda escudos térmicos by Mateu Ortoneda
ANUNCIO

Categorías

Productos de interés

Síguenos

Tu tienda0
Aún no agregaste productos.
Seguir viendo
0