Este proyecto de vivienda de tapial con techo verde surge de la ilusión del propietario de construir su hogar con criterios constructivos alineados con sus valores de conciencia y respeto por el medio ambiente y la salud personal y del planeta.
La vivienda se encuentra en el municipio de Bellcaire d’Urgell, comarca de la Noguera, a 11 km del municipio de Balaguer y a 35 km de Llèida, capital.
Construida en tapial (muros de tierra apisonada), técnica constructiva tradicional muy abundante en la provincia, que cuenta con millares de edificios habitados.
La casa es de una sola planta, de forma rectangular; dos sectores paralelos la dividen en dos partes: zona de día y zona de noche.
Ha sido diseñada con criterios de bioarquitectura y bioconstrucción, utilizando materiales naturales en gran parte. Se ha tenido en cuenta la geobiología del lugar para promover la salud de los ocupantes, el ahorro y eficiencia energética.
El proyecto de la vivienda de tapial con techo verde. Diseño natural
El diseño surge de la parte intuitiva del arquitecto del proyecto, ajustando las medidas a la geometría natural “sagrada” del lugar, teniendo en cuenta la latitud y el movimiento natural del sol durante los solsticios y equinoccios, durante todo el año; esta geometría se ha utilizado durante miles de años en espacios sagrados, lugares de culto y patrimonio arquitectónico. Se han ubicado los espacios de descanso en la parte trasera, norte, y los espacios de actividad en la parte sur.
Estudio geobiológico
Antes de implementar la vivienda en el solar, se estudiaron las corrientes de agua subterráneas en movimiento para localizar su paso y tomar consciencia de ello. Las imágenes aéreas del solar, antes de edificar, dieron pistas de donde se podían encontrar.
El agua subterránea pasa por la fachada posterior de la vivienda, dejando libre el interior.
La excavación de los pozos para el sistema de geotermia también confirmó el curso de la corriente de agua subterránea en la parcela.

Los espacios
El primer espacio se encuentra abierto orientado al sudeste, con grandes aberturas protegidas por los aleros de la azotea, se ha emplazado la cocina, el comedor y la sala de estar. En este mismo espacio se sitúa el estudio, separado de la sala a través de una estructura de madera, que permitirá la ubicación de la tv, con capacidad para almacenaje y liberar los muros de tierra compactada (tapial) de mobiliario.
El segundo espacio está orientado al noreste y cuenta con aberturas más pequeñas, aquí se ha ubicado la habitación doble, el baño, una segunda habitación y el garaje-taller con las instalaciones de geotermia.

Estudio bioclimático
En el diseño del proyecto se tuvo en cuenta la orientación de la vivienda con el fin de situar los espacios según su relación con el exterior.
- La fachada sudoeste consta de aperturas grandes para el aprovechamiento de la luz solar y las aportaciones del sol cuando su acimut es bajo en invierno.
- En la fachada al noreste, el área de las habitaciones, hay aperturas más pequeñas para no perder una gran cantidad de energía térmica.
- En la fachada oeste no hay aperturas para evitar el sobrecalentamiento en verano y el ruido de la carretera.
- En la parte norte de la fachada oeste se encuentra el garaje, espacio “tapón” de la vivienda porque protege de la insolación en verano.


La obra
La cimentación de esta vivienda de tapial con techo verde esta realizada con zapatas corridas con hormigón ciclópeo de cal y piedra y armado con caña de bambú.
Para llegar a un nivel del subsuelo resistente tuvimos que llenar los pozos de hormigón de cal NHL y un 30% de piedra, seguidamente las banquetas de cimentación, ejecutadas también con hormigón de cal NHL y armadas con bambú.
El recubrimiento de hormigón del armado de bambú, debe ser mayor que el utilizado con acero, para evitar la retracción del hormigón.
La solera se ha ejecutado con múltiples capas.
La primera capa es de 15 cm de grosor de gravas para evitar la humedad.
La segunda es una solera de hormigón de cal hidráulica NHL.
La tercera son dos placas de corcho natural de 2+2 cm de grosor sobre una cama de arena de 2 cm.
Sigue una lámina impermeable transpirable.
Finalmente, una solera de mortero de hormigón de cal hidráulica armado con fibras de polipropileno y árido fino de mármol de 7 cm de grosor, pulida y enlucida, que realiza la función de pavimento continuo de acabado, y donde se ha instalado el suelo radiante para climatizar.

Muros de tapial
El muro de tierra compactada es una técnica milenaria que se ha utilizado en todas partes del mundo; el sistema se basa en compactar la tierra mediante tongadas de 7-10 cm.
Muro monolítico
Todos los muros de la vivienda se han construido de tierra apisonada, tapial.
Esta obra se ha ejecutado con una mezcla de arcilla, limo, arenas, gravas y un pequeño porcentaje de cal hidráulica natural (NHL-5) para dar estabilidad al muro frente al desgaste del agua en días de fuertes lluvias.
Se han utilizado tintes naturales en diferentes colores para aportar detalles en distintos lugares.
El muro se ha protegido en la parte inferior con una lámina impermeable para evitar el ascenso de humedad por capilaridad y en la parte superior, con los aleros de la cubierta de madera.
Inercia térmica, confort térmico y ahorro energético
La característica más importante del muro de tapial es la inercia térmica, propiedad esencial para el clima mediterráneo. A lo largo del día se acumula temperatura sobre el material del muro que luego, durante un largo período de tiempo, irradia hacia el interior de la vivienda, creando una temperatura estable.
Las construcciones con tierra proporcionan alta inercia térmica en el interior del edificio y también una gran transpirabilidad (ambas propiedades utilizadas en la bioconstrucción), generando un ahorro energético importante y, sobre todo, un confort térmico en cualquier estación del año.

Cubierta
Una estructura de madera laminada de 240 x 120 mm de sección cubre la vivienda. Su larga luz entre muros nos ha permitido realizar la estructura con madera maciza.
Un doble tablero de fibras de madera OSB (panel de fibras de madera) forma un sándwich para insuflar celulosa en el interior con valor de conductividad térmica de 0,039W/m·K, consiguiendo un grosor total de aislamiento térmico de 24 cm de espesor y con una densidad de 50-55kg/m3.
Esta solución nos proporciona un valor de transmitancia térmica de 0,15 W/m² K, 2,7 veces menor que el valor que determina el DB- HE del CTE, normativa estatal actual. El valor de 0,15 W/m² K es el valor contemplado por los criterios que utilizan las viviendas Passivhaus.
Un techo verde de 130 m2 de superficie cubre toda la vivienda aportando inercia térmica, aislamiento acústico y un aumento de confort en el interior.
La disposición e instalación correcta de las láminas nos asegura su buen funcionamiento:
Una primera capa de pintura bituminosa y una lámina impermeable EPDM (prácticamente los únicos elementos de toda la obra que provienen del petróleo).
Una lámina de drenaje con geotextil para acumular agua en el techo y dar humedad a las especies vegetales que lo conforman.
15 cm de tierra vegetal para la plantación de ornamentales resistentes a las fuertes sequías de verano. La tierra utilizada debe ser pobre en nutrientes.
¿Porque el techo verde?
El techo verde ayuda a la integración paisajística del edificio con el entorno, por lo que mejora el microclima gracias a que proporciona oxígeno a la atmósfera a través del proceso de fotosíntesis de las especies vegetales que cubren el techo; facilita el drenaje y amortigua el impacto de las fuertes lluvias, y permite aminorar las escorrentías que se pueden generar en las redes del saneamiento público. También favorece la biodiversidad fomentando el acercamiento de insectos y aves a los espacios construidos.
En nuestro caso, el agua de la cubierta se recupera en las cisternas de acumulación de agua.
Recogida de aguas pluviales
La ligera inclinación del techo de esta vivienda de tapial con techo verde dirige el agua filtrada por la capa de tierra hasta los tres sumideros y desde estos hasta los tres depósitos enterrados, con una capacidad de 24.000 litros (8.000 l/depósito) y ubicados en la parte norte de la parcela; se utilizará para el riego del mismo techo verde, del jardín exterior, del huerto y para alimentar la cisterna del inodoro.
Carpinterías
Las carpinterías son de madera de abeto douglas, tratadas con aceites naturales que dejan transpirar la madera.
Ventanas con cámara de aire de 4 + 12 + 3 + 3 mm.

Calefacción por suelo radiante alimentado por bomba geotérmica
Para la producción de agua caliente sanitaria y calefacción a baja temperatura se ha instalado una bomba geotérmica con una sonda a 100 m de profundidad.
Este sistema permite ahorrar energía al aprovechar la temperatura constante que se encuentra a esa profundidad durante todas las estaciones climáticas. El suelo es de composición arcillosa, por lo que la transmisión térmica de temperatura del suelo al agua del circuito de geotermia es excelente.
La calefacción por suelo radiante proporciona una calefacción homogénea dentro de la vivienda; por lo que en verano, con la misma instalación se puede hacer circular agua a baja temperatura para obtener un enfriamiento del suelo y bajar la temperatura interior unos grados (mediante el control de la temperatura de rocío para evitar condensación en el pavimento).
Todas las técnicas y materiales utilizados en esta vivienda de tapial con techo verde son de bajo impacto ambiental y energético minimizando, de esta forma, el consumo de energía en la ejecución de la obra y el uso de la vivienda para el futuro.
Ficha Técnica Situación: Bellcaire d’Urgell, Lleida. Propiedad: Manel Codina Montull. Arquitecto: Albert Camps (www.arquitecturaorganica.es). Arquitecto técnico: Miquel Escobar Forcada (www.bioarkiteco.com). Constructora: Coecocoop, Sccl (www.coeco.coop). Técnicas constructivas: Vivienda de muros de tierra compactada, techo verde con estructura de madera y aislamiento de celulosa insuflada. Climatización de geotermia con suelo radiante y almacenamiento de agua de lluvia. Año: Diciembre 2015. Superficie construida: 216 m3. Superficie útil: 170 m2. Superficie de techo verde: 240 m2. Superficie de suelo radiante: 119 m2. Madera estructural: 16 m3. Muros de tierra: 92 m3. Presupuesto: 161.945 E. Total m2: 750 E.
Un proyecto reconocido y premiado La BioArquitectura y la EcoArquitectura permiten concebir la arquitectura y la construcción de forma holística y poder afrontar los cambios del planeta y para beneficio de las futuras generaciones. El proyecto obtuvo en 2017 el 1er premio de la Categoría 2 “Buenas prácticas o innovación en el uso de materiales naturales y tradicionales” promocionado por BaM (BioArquitectura Mediterránea), asociación sin ánimo de lucro que promueve el fomento del conocimiento y las buenas prácticas en la arquitectura y urbanismo favorables a la vida y a la vitalidad de las personas, de las sociedades y del planeta en el siglo XXI. El premio fue publicado por EcoHabitar en la revista número 55/XIV año· otoño 2017.
*Miquel Escobar, de Bioarkiteco. Arquitecto técnico e interiorista, freeLancer. Trabaja en proyectos de bioarquitectura y bioconstrucción con criterios ecológicos y una visión holística para aportar a la sociedad y al medioambiente prácticas, respetuosas y saludables para las personas y el planeta.
www.bioarkiteco.com – @bioarkiteco.
Proyecto aparecido en la revista EcoHabitar en el nº 58 de verano de 2018