Una preocupación para muchos autoconstructores es la calidad del trabajo que ofrecerá el voluntariado. Algunas personas piensan que representa más bien una molestia, a otras les ha encantado la experiencia; no solo han ejecutado un buen trabajo, han generado una amistad para toda la vida.
En mi experiencia, las personas voluntarias tienen una motivación extra para aprenderlo todo y ejecutarlo bien, con más compromiso y amor que un peón contratado, ya que quieren construir sus propios sueños algún día. Para mí, casi siempre ha sido una experiencia gratificante.
El trabajo consiste en abarcar la obra con inteligencia para que tengan una supervisión y formación adecuada. A veces me ha costado más dirigir una cuadrilla de contratados que una de voluntarios sin experiencia, ya que estos acostumbran a poner más interés. Si puedes permitirte contratar a trabajadores, posiblemente trabajarán con más eficiencia y serán más rápidos, pero no hay garantía de que el trabajo sea mejor.
El voluntariado
En primer lugar, es importante recordar que no solo son trabajadoras. Es un intercambio, no una transacción comercial. Si no puedes recibirles con cariño, mejor no invitarlos.
Si optas por esta opción no te faltará ayuda. Hoy en día, hay más personas buscando oportunidades que obras que les acojan y podrás contar con ellas para cualquier fase de la obra, o para la obra completa.
La búsqueda, consejos
- Mejor pocos y buenos, que muchos y descontrolados. Máximo 6 voluntarios, a no ser que sean supervisados por un experto.
- Que vivan lo más lejos posible. Si no los conoces, mejor. Se quedarán más tiempo y estarán 100% enfocados en la experiencia. Si son locales (amigos y familiares) serán menos constantes, con menos concentración y menos respetuosos. Donde hay confianza, ya se sabe…
- Saber muy bien lo que se ofrece, lo que se espera y las condiciones de la convivencia. ¿Puedes enseñarles o vais a aprender juntos? ¿Cuántas horas de trabajo van hacer por día? ¿Qué días de la semana? ¿Vas a hacer todas las comidas con ellos, o se tendrán que autogestionar? ¿Esperas su colaboración en la cocina y/o limpieza de zonas compartidas? ¿Hay un inodoro «real» o baño seco? ¿Duchas frías o calientes? Es mejor tenerlo todo especificado y claro antes de que lleguen. Es preferible que no vengan a que se encuentren con problemas que para ellos puedan ser importantes.
- Definir una estancia mínima. Se recomienda que sean 1-2 semanas. Si permites que las personas vengan por períodos cortos, se les debe dar trabajos fáciles y no cualificados (ej. tamizar arena, mover materiales o mantener la paja suelta bajo control).
- Definir un tiempo máximo, con posibilidad de prórroga. De esta manera, si el voluntario no encaja con la obra o grupo, o no está haciendo un trabajo de calidad, puedes pedir que se vaya sin ofenderle.
En caso de tener que pagar a un experto para dirigir a los voluntarios en la obra, es razonable pedirles una pequeña aportación para ayudarte con los gastos. A cambio de este dinero aprenderán a hacer un buen trabajo, ya que en muchas obras de principiantes no hay ninguna garantía de que sea así.
Si eres voluntario o voluntaria, asegúrate de si puedes “fiarte” de las decisiones tomadas en la obra. Puede que aprendas lo que no deberías hacer, sin saberlo. A la vez, deberías tener en cuenta que la sensación y cariño generados nunca son lo mismo cuando hay dinero por medio. Pide lo mínimo de lo que realmente necesitas.
Bienvenida y orientación
Lo básico: cuando lleguen, dales la bienvenida y las gracias. Han viajado por su propia cuenta para venir y ofrecer su mano de obra gratuita en la construcción de tu hogar.
- Asegúrate de que cada nuevo voluntario reciba una orientación que incluya: salud y seguridad, un recorrido por los espacios, una explicación de las horas de trabajo, convivencia, organización de las comidas, etc.
- Pídeles un número de contacto de algún familiar o amigo, por si ocurre algo.
- Asegúrate de que sepan cómo usar, tratar, limpiar y almacenar herramientas y materiales.
- Si llegan en diferentes momentos, en lugar de todos a la vez, utiliza un «sistema de compañeros» en el que los voluntarios experimentados actúen como guías o mentores para los nuevos.
- Pídeles que te informen si algo se pierde, se rompe o se agota. Algunas personas se sienten avergonzadas de hacerlo. ¡Asegúrate de que sepan que no te enojarás!
- Tómate tiempo para asegurarte de que todas las personas se sientan útiles, integradas y bienvenidas.
Trabajando
El «sistema de compañeros» funciona muy bien para hacer el trabajo. Es más divertido trabajar en parejas, pero rótalas para que tengan la oportunidad de trabajar con diferentes personas.
Tu objetivo es construir tu casa. Por lo tanto, si están dispuestos, permite que utilicen sus habilidades y se especialicen en un aspecto de la construcción. Por ejemplo, pídele a alguien relacionado con el mundo de la madera que haga la carpintería. Este «experto» puede orientar a las personas nuevas hacia su tarea, y ayudarte así a realizar el control de calidad en su área de especialización.

Consejos
- A veces, encuentras un voluntario que simplemente no es capaz de trabajar con cuidado. Si es así, dale un trabajo en que esto no sea un problema (pinche de cocina, por ejemplo) o emparéjale con alguien más meticuloso que pueda vigilarle y corregir sus errores.
- Asegúrate de que tú (o el jefe de la obra) tenga suficiente fuerza de voluntad para corregir errores y pedir a los voluntarios que vuelvan a hacer un trabajo que no esté bien hecho. Si no puedes hacerlo, mejor que contrates a alguien con quién no tengas problemas exigiendo calidad.
- Intenta crear una atmósfera divertida dentro y fuera del lugar de trabajo.
- Realiza la orientación todas las mañanas: hacer algunos estiramientos, pedir a las personas que compartan cómo les está yendo (una o dos palabras son suficientes) y ver si hay alguna necesidad que deba satisfacerse. Luego organiza el trabajo y distribuye las tareas.
- Después de terminar el trabajo del día, hacer un círculo de cierre en el que las personas puedan expresar lo que han amado/aprendido en ese día, también es el momento de hacer cualquier anuncio importante mientras todos están escuchando. Y agradecer por su arduo trabajo y colaboración.
Salud y seguridad
Es inusual que se produzcan más accidentes graves en las obras de autoconstrucción que en la construcción convencional. Esto se debe a que las personas trabajan con menos estrés y se sienten felices por hacer lo que están haciendo. El trabajo puede ser más lento, pero esto contribuye a reducir las tasas de lesiones. Para lograrlo, es importante implementar buenas prácticas de salud y seguridad que prevengan accidentes.
El trabajo en equipo es salud mental
Trabajar en “equipo”, fomentando una actitud cooperativa, facilita el trabajo. Los círculos al principio y final del día ayudan mucho. Además de sentirse más cuidados, los círculos permiten planificar mejor el trabajo y analizar lo que ha sucedido durante el día. Hacerlos dentro de las horas de trabajo planificadas, no fuera. Al principio, les puede parecer extraño que se quite tiempo de la jornada laboral para escuchar y compartir, pero descubrirán que el trabajo se hace con más eficiencia y calidad si hay armonía en el equipo.
Salud física
- Cuida tu cuerpo y habrá menos accidentes.
- Tomarse 10 minutos al comienzo del día para calentar.
- Siempre es importante estar hidratado haga frío o calor.
- Cuando uno no se siente cómodo físicamente es difícil estar alerta. Ahí es cuando ocurren los accidentes.
- El cansancio es una de las principales causas de accidentes. Es buena idea tomar un descanso de 10 a 20 minutos (con una bebida y un picoteo) cada dos horas.
- Asegurarse de que todos sepan dónde está el botiquín de primeros auxilios y de publicar claramente el número de teléfono para llamar en caso de una emergencia.
Herramientas
Cuando se trabaja con constructores sin experiencia, es importante explicar cómo funciona cada herramienta, y dónde y cómo se deben almacenar. Muchos pueden ser demasiado tímidos para admitir que no tienen este conocimiento, y otros pueden pensar que saben cómo funciona, pero pueden estar equivocados. Es mejor explicar que lamentar.
Mantener el área de herramientas bien organizada y limpia. Todo debe tener un lugar. Es una buena idea que cada día haya una persona responsable de mantener el orden en este área; puede ser un trabajo fijo o rotativo.
Conclusión
En permacultura, se habla de tres ejes principales que tienen que estar presentes en todo momento: Cuidado a la Tierra, Cuidado a la Gente y Repartición Justa. En bioconstrucción, la primera está asegurada. Cuidar a la gente significa tener un trato adecuado con todos los y las que participan, tanto si son pagadas como si no. Y al abrir tu obra a extraños estás repartiendo los beneficios, ayudando a otros a aprender lo necesario para cumplir sus propios sueños en un futuro.
Os aseguro que siguiendo mis consejos no vais a tener problemas con voluntariados. Lo más seguro es que, como yo, acabes haciendo la casa y amistades para toda la vida. Lo primordial, tanto si recibes como si te ofreces como voluntario o voluntaria, es que intentes entender las prioridades y necesidades de cada rol y que los respetes. Claridad, sinceridad, y cariño.
Si necesitas voluntarios y no sabes cómo encontrarlos
Puedes anunciarlo en redes locales, nacionales, internacionales, y en organizaciones de voluntarios:
- La Red de Construcción con Paja (www.casasdepaja.org) tiene una sección de Anuncios/Voluntariado donde puedes solicitar voluntarios u ofrecerte.
- Anuncio de oportunidades de voluntariado en el Boletín Taller con Co (de la autora); solo hay que enviarle un correo con los detalles.
- La mayoría de los países tienen sus propias organizaciones nacionales de construcción con paja. Consulta la Red Europea de Construcción con Paja: https://strawbuilding.eu/about-esba/members/.
- Hay varias ONG que anuncian oportunidades como POOSH (http://thepoosh.org parecido a WWOOF, pero para la construcción) y TWIZA (https://fr.twiza.org principalmente en Francia, pero también para el extranjero).
Más info: https://tallerconco.org/
Artículo publicado en la revista EcoHabitar Nº 72 invierno de 2022
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